Los Recolectores de Perfume

Los machos de las abejas de las orquídeas se ofrecen a las hembras con complicadas mezclas de perfume, de acuerdo a una explicación acerca del comportamiento de recogida de esencias por parte de los machos. La idea tras esta hipótesis es que cuando un macho despliega una particular mezcla de perfume, está anunciando sus buenas cualidades ante parejas potenciales. Los machos de las abejas de las orquídeas vuelan largas distancias y visitas muchas fuentes diferentes de olores para conseguir fabricar un olor atractivo. Los científicos creen que estos machos utilizan esas esencias del modo en que algunas aves, como los pavos reales, usan sus elaboradas o brillantemente coloreadas plumas para juzgar la calidad de un macho—y la probable calidad de los genes que pasarán a su descendencia—Las hembras de las abejas de las orquídeas normalmente sólo se aparean una vez en su vida, así que para ellas es especialmente importante encontrar un buen macho.

Diferentes especies de abejas de las orquídeas prefieren diferentes perfumes, y ¡los científicos han descubierto que la recolección de perfume podría incluso jugar un papel en la evolución de nuevas especies de orquídeas! Los machos recolectan una por una las esencias que conforman sus particulares perfumes de muy diferentes fuentes, incluyendo flores, madera en descomposición, heridas de los vegetales e incluso de excrementos.

Fabricante de perfumes en el año 1900.

Para recolectar los olores, las abejas usan un proceso muy similar a las técnicas utilizadas por los perfumistas, las personas que fabrican perfumes para las mujeres y colonias para los hombres. Lo que hacen es atrapar las moléculas que producen la esencia recubriéndolas de una sustancia grasa. A diferencia de los perfumistas, que necesitan utilizar productos químicos especiales, las abejas de las orquídeas producen una sustancia grasa en unas glándulas especiales de sus cuerpos.

Una vez que han atrapado el olor en la secreción grasa, lo absorben con sus densas matas de pelos en el par de patas delanteras. Después, las abejas pasan a realizar una serie de complicados movimientos, usando para ello sus tres pares de patas, y así llevan las esencias hacia sus extra largas tibias de las patas traseras. Desde una cierta distancia, parece como si estuvieran pedaleando en el aire sobre diminutas e invisibles bicicletas.

Una vez escondida en las tibias traseras, la mezcla grasa de esencias se absorbe hacia un pequeño tubo en el interior hueco de las tibias, llamado el órgano tibial trasero (HTO son sus siglas en inglés). El órgano tibial trasero (HTO) está recubierto de complicados dobleces que aumentan la superficie de la zona, parecidos a los del cerebro. Los espacios entre los dobleces están cubiertos con pelos ramificados, y la combinación entre los dobleces y los pelos hace que este órgano actúe como una esponja. Los HTOs son muy eficientes y pueden almacenar esencias durante un largo periodo de tiempo. Mientras las abejas recolectan nuevas esencias, se van combinando en el HTO para producir el perfume que usarán para atraer a sus parejas.

Cuando el macho está listo para aparearse, representa su espectáculo en su pequeño territorio y espera que las hembras acudan y le pongan a prueba. El macho, típicamente, realiza su actuación sobre un troco de árbol o un palo, haciendo cortos vuelos y batiendo sus alas mientras va desprendiendo el perfume recolectado. Si una hembra acude y le gusta lo que huele, la pareja se apareará y producirán una nueva generación de abejas de las orquídeas.